Mía
en la soledad que opacaste con tu regocijo,
pintando de colores mi vida
Mía.
Musa en de versos
y alegría en mi vida
Mía
tan mía como la naturaleza es de la tierra,
y la noche de la luna
Mía,
desde el primer día que vi tu sonrisa,
enamorando mi alma
Mía,
cuando te bese y rozando tu vestido blanco,
bendiciéndome nueve meses después con tal milagro
El destino me confeso,
en el silencio de la durmiente noche
que tú siempre ibas a ser mía.
Que inspirarías al sol con tu dulce melodía,
resplandeciendo sobre el horizonte,
iluminando mi día.
Escrito por: Maximiliano Braslavsky
No hay comentarios:
Publicar un comentario